Porque el amor con el que reemplazamos al amor incondicional, es condicional y está plagado de manipulaciones y frustraciones, pues tenemos miedo de ser abandonados. Nos decimos: “Oh, mejor no voy a amar mucho, porque recuerdo una vez que me hirieron”, y recordamos todas las frustraciones de nuestra niñez. Para mí fue mi miedo al abandono, que venía de la creencia de que mi madre natural me había abandonado. Siempre me estaba escapando del amor, porque creía que no lo merecía.

Buscando el amor afuera 

Los surcos de separación que creamos para poder tener nuestra experiencia humana, nos hacen buscar el amor afuera, y eso siempre es frustrante. Pensamos que no nos merecemos el amor y que no podemos confiar en él. Pensamos que nos tenemos que proteger de él, porque nos hace sentir vulnerables. Siempre nos estamos protegiendo. 

El amor está adentro 

Pero el amor real – el amor incondicional – está adentro y se encuentra en el ser, en simplemente estar con nosotros mismos. Y esa es una de las cosas mas difíciles de hacer para nosotros, porque nuestro intelecto nos dice que nuestro amor y nuestra satisfacción están afuera. 

¿Realmente queremos amor?

Sé que todo esto suena contradictorio, porque probablemente todos podríamos jurar que queremos amor. Podríamos jurar que nos gusta estar con nosotros mismos, pero simplemente no es verdad. Somos contradicciones que caminan, pero solo tenemos que verlo. Y cuando lo vemos, podemos decir: “Ok, puedo soltar eso ahora”, y solo ser el amor. 

Dar sin expectativas

Porque el amor verdadero simplemente da, y da sin expectativas, carece de resentimiento. No tiene un precio, no controla. Pero tiene que venir del ser. Tienes que brindarte ese amor a ti mismo antes de poder brindárselo a otros. No importa lo agradable que seas como persona, es imposible que ames a nadie incondicionalmente mientras no te ames a ti mismo incondicionalmente. 

Ser “buena persona” 

Yo solía ser una “buena persona espiritual”, y solía abandonarme en todo tratando de amar a todo el mundo. Pero a mí misma no me amaba. Así que cuando comencé a sanar y vi lo que había estado haciendo, lloré. Realmente estaba impactada por lo mucho que me había lastimado a mí misma, por lo buena que había sido con todos los demás, pero lo mucho que me había herido yo a mí. 

Y todos tenemos la tendencia a hacer eso, especialmente las mujeres. Pero los hombres también lo hacen. Y lo único que necesitamos es verlo y ser gentiles. 

Vuelve a tu corazón 

El amor condicional nunca puede estar a la altura del amor que habita permanentemente en tu corazón. Así que vuelve a tu corazón, instálate ahí y deja que ese amor verdadero se mueva hacia afuera, sin miedo. 

Expande tu conciencia

Si no lo puedes ver ahora, la expansión de la conciencia te mostrará todo, te mostrará la naturaleza del amor. Te mostrará que el amor da y que no tiene condiciones, y comenzarás a verlo. La naturaleza del amor no tiene necesidades. Comenzarás a experimentarlo, porque viene con la expansión de la conciencia. 

¡Así que solo sé gentil!
Solo di:
“¡Quiero ver!
¡Quiero ver y quiero soltar! “,
y el Universo te mostrará todo.
Solo necesitas ser consciente.