La Fundación Isha Educando Para La Paz es una fundación internacional con fondos propios, dedicada a enseñar el Sistema Isha gratuitamente en toda América Latina. Trabajando con niños, presos, enfermos terminales y personas con discapacidad, tiene como objetivo apoyar a todos aquellos que pasan por circunstancias difíciles.
El enfoque de Isha para la paz mundial comienza en el corazón de cada ser humano. Inspira al individuo a asumir la responsabilidad de su propia felicidad y encontrar la fuerza interior para ir más allá de las circunstancias de la vida.
Los resultados de sus iniciativas son impactantes: los presos de alta seguridad comentan que están encontrando la libertad interior, ex-adictos logran saciar la necesidad de su droga de preferencia.
Conoce algunas de nuestras labores sociales
En octubre de 2010, Isha Judd visitó Talcahuano y Talca, dos de las ciudades más afectadas por los recientes terremotos en Chile. Más de 6.000 personas participaron en los eventos, con el apoyo de los municipios locales y los medios de comunicación nacionales.
«Aprendimos a enfrentar los problemas y desafíos de la situación actual, que son particularmente difíciles para nosotros los bomberos, debido a las emergencias que nos enfrentamos día a día».
Sergio Cortés, bombero voluntario.
«Fue una experiencia positiva para todos en nuestra comunidad, especialmente en estos momentos de gran tensión».
Maritza Durán
«Al aprender a cerrar los ojos y relajarnos, ya estamos resolviendo la mitad del problema».
Alfredo Murat

Nombramiento como Doctora Honoris Causa, Cuernavaca, México
El 18 de abril de 2012, Isha Judd recibió un Doctorado Honoris Causa, otorgado por la Universidad Internacional de Cuernavaca, por su «contribución a la mejora de la condición humana», destacando su compromiso social y su trabajo en las cárceles mexicanas.
Hasta la fecha, Isha Judd ha enseñado a más del 20% de los internos del Reclusorio Varonil Oriente de la Ciudad de México, la cárcel más grande de América Latina con una población de más de 11.800 reclusos. Los funcionarios del reclusorio informaron que, como resultado, «los niveles de agresión en la cárcel han bajado notablemente».
«La presencia de Isha Judd fue suficiente para que el auditorio entrara en total silencio. Cuando comenzó su seminario, la paz y la tranquilidad inundaron la sala, y los 800 internos presentes entraron en un estado de silencio profundo. Cuando vi a tantos hombres yendo hacia su interior me di cuenta de que estaba funcionando: se había plantado una semilla dentro de cada uno de ellos».
Alejandro Escorza Arredondo, director del sistema educativo del reclusorio.
«Fue una experiencia extraordinaria. Al entrar al auditorio, fue recibida cálida y emotivamente por los internos».
Rubén Fernández Lima, director de la cárcel.

El 17 de septiembre de 2010, Isha Judd visitó el Senado Argentino para recibir un reconocimiento especial por su papel como Embajadora de Paz, destacando su trabajo en las cárceles del país. Los programas de Isha Judd han reducido drásticamente la violencia entre los internos y sus niveles de estrés. Su fundación firmó recientemente un acuerdo con el Sector Penitenciario Bonaerense, para llevar sus programas a las 54 cárceles de la provincia de Buenos Aires.
«… La experiencia fue increíble. Todos los internos disfrutaron del evento: su atención respetuosa y buen comportamiento es prueba de ello… Queremos agradecer a Isha Judd por ayudar a mejorar la calidad de vida de los internos».
Ricardo Jacod, Director del Centro Penitenciario de Olmos, Provincia de Buenos Aires

Comentarios de los internos
«Quiero cambiar mi vida, y estas enseñanzas me han dado una nueva visión para el futuro, me han llevado a valorar las cosas que tengo».
«Estoy experimentando una paz interior que no había sentido hace mucho tiempo. En el mundo, hay muchas personas que supuestamente son libres, pero estoy empezando a darme cuenta que en el fondo, no lo son».
«Durante la práctica me sentí muy relajado. Me sentí tranquilo y pacífico y comencé a entregarme a una experiencia profunda de amor. Creo que el amor es la cosa más poderosa del mundo. Cuando lo sentí, todos mis temores desaparecieron».

- Fomentar la evolución espiritual, yendo mas allá de la perspectiva individualista de la vida para percibir el mundo en un sentido global, mas allá de la religión, nacionalidad, raza o género.
- Inspirar a las próximas generaciones a alcanzar una percepción más inclusiva del mundo, a través del fomento en los jóvenes de una visión más global.
- Apoyar la participación y el afianzamiento del poder en la mujer.
- Ayudar a cumplir la necesidades sociales y personales de las personas de tercera edad.
- Ayudar a establecer un sistema ecológico sustentable, buscando un equilibrio entre naturaleza, ciencia y evolución, en un sistema global.
El 5 de Febrero del 2013, Isha Judd fue invitada a enseñar a 200 soldados en la 24a Zona Militar en el estado de Morelos, México. Fue la primera vez que su sistema fue entregado a soldados en servicio activo, en un evento lleno de emoción y profundidad. (Leer más sobre el evento aquí)

El 17 de mayo de 2011, Isha Judd firmó un acuerdo oficial con la Gendarmería Nacional de Chile, para ofrecer el Sistema Isha en todas las cárceles del país.
En una reciente encuesta de los internos participantes del programa de Isha Judd, el 55% de los presos informó que se sentían con mayor autoestima debido a la práctica del Sistema Isha. El 54% también dijo sentirse menos agresivos, y el 66% reportó haber mejorado sus relaciones con los demás (ver nota enseñanza Gendarmes junio 2012).
En Uruguay, su fundación ha establecido un convenio con el Ministerio del Interior y la Dirección Nacional de Cárceles. Según éste, los internos que cursan el programa de reeducación del Sistema Isha gozan del beneficio de redención de pena.